Alberto Melián
Los nombres más rutilantes son los de Alberto Melián en -56 Kg y Yamil Peralta en -91 Kg, ambos presentes en Londres 2012, ahora con mucha más experiencia que en ese momento, por lo cual los objetivos serán mas ambiciosos. También clasificó Fernando Martinez en la categoría más liviana la de -52 Kg. Estos eran los clasificados hasta el último día del preolímpico. Pero la velada de cierre iba a tener grandes novedades, el escenario era al menos esperanzador. Tres argentinos llegaban con la chance de clasificar a pesar de haber caído en semifinales. De esos tres, dos lograron ese gran sueño.
El primero en hacerlo fue Ignacio Perrín (-60 Kg), seguramente de la manera que él no quería. Ni siquiera tuvo que subir al ring ya que su oponente el canadiense David Gauthier se bajó de la pelea por una lesión en su hombro. Perrín quería pelear, se le veía en la cara mientras la gente lo felicitaba.
Luego el que si tuvo que calzarse los guantes en el salón Frers del predio de La Rural fue el enérgico Alberto Palmetta en la categoría de -69 Kg. El Beto como le dicen sus amigos, dejó el alma, la vida. Se lo quería comer al peligroso guatemalteco Lester Martinez y en ciertos momentos lo hizo. En el último round mermó un poco su rendimiento producto del cansancio pero eso no impidió que los jueces lo vean como unánime ganador y Palmetta termine llorando de la emoción por cumplir su sueño olímpico. Sin lugar a dudas el héroe de la tarde.
Casi sin tiempos para festejos se subía al cuadrilatero Kevin Espíndola en la categoria de los pesados (+ 91 Kg), enfrente estaba el enorme triniteño Paúl Niguel. No hubo chances para nuestro compatriota, el poderío del moreno era notable. Hasta que lo latente se transformó en realidad. Llegó un golpe a la zona hepática de Espíndola que lo dejo de rodillas por varios instantes a Espíndola, fue nocaut y pasaje olímpico para el representante de Trinidad Y Tobago.
La que también tuvo un buen desempeño fue la cordobesa Dayana Sánchez que terminó en la cuarta posición. Seguramente no era lo que nuestra medallista panamericana venía a buscar, pero su juventud y condiciones dan una luz de esperanza con lo que respecta al boxeo femenino.
Todos aquellos que no hayan clasificado en esta ocasión tendrán una nueva chance en el preolímpico mundial a disputarse en Bakú, Azerbaiyán. No será fácil, pero quién dice no haya algún argentino dando la nota.
Cabe destacar como dato adicional que los hombres dejarán de usar los cabezales en los próximos juegos olímpicos. En tanto las mujeres sí lo utilizarán en su peleas.